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¿Qué es este fármaco?

La SELEGILINA es un inhibidor de la monoaminooxidasa (IMAO) que se utiliza en conjunto con la levodopa-carbidopa para tratar la enfermedad de Parkinson. Se prescribe cuando hay una disminución en la respuesta a la levodopa.

¿Qué información debería proporcionar a mi médico antes de usar este medicamento?

Es importante informar si se consume alcohol con frecuencia, si se tiene enfermedad renal o hepática, o si se ha experimentado alguna reacción alérgica a la selegilina u otros medicamentos. También se debe mencionar si se está embarazada, en periodo de lactancia o se está tratando de concebir.

¿Cuál es la forma adecuada de tomar este medicamento?

Este fármaco se toma por vía oral con un vaso de agua y en intervalos regulares. No se debe exceder la dosis prescrita ni interrumpir el tratamiento sin consultar al médico.

Es importante consultar al pediatra antes de administrar este medicamento a niños, ya que pueden requerir cuidados especiales.

En caso de sobredosis, se debe contactar al Servicio de Información Toxicológica o acudir de inmediato a urgencias.

NOTA: Este medicamento es de uso personal, no se debe compartir con otras personas.

¿Qué hacer en caso de olvidar una dosis?

Si se olvida una dosis, se debe tomar tan pronto como se recuerde. Sin embargo, si está cerca de la hora de la próxima dosis, se debe omitir la dosis olvidada y continuar con el horario regular. Nunca se debe tomar una dosis doble o extra.

¿Qué medicamentos pueden interactuar con este fármaco?

No se debe tomar este medicamento con ciertos fármacos como altretamina, atomoxetina, o cafeína, entre otros. Además, puede interactuar con otros medicamentos como los antidepresivos o los analgésicos.

Es importante informar al médico sobre todos los medicamentos, hierbas, suplementos y hábitos como fumar o consumir alcohol.

¿Qué precauciones debo tener durante el tratamiento con este medicamento?

Es fundamental asistir regularmente a las consultas médicas para monitorear el progreso del tratamiento. Los efectos completos del medicamento pueden tardar varias semanas en manifestarse por completo, por lo que no se debe suspender bruscamente sin indicación médica.

Los pacientes y sus familias deben estar alerta ante cualquier cambio en el estado de ánimo, especialmente al inicio del tratamiento o después de ajustes en la dosis.

En dosis superiores a 10 mg diarios, se debe prestar atención a la interacción con alimentos que contienen tiramina, ya que puede causar efectos secundarios graves.

Se recomienda evitar conducir, operar maquinaria o realizar actividades que requieran atención hasta conocer cómo afecta el medicamento. El consumo de alcohol debe evitarse durante el tratamiento.

Es posible experimentar sequedad bucal, para lo cual se pueden masticar chicles sin azúcar o chupar caramelos y beber agua. Si persisten los síntomas, se debe consultar al médico.

No se debe auto medicar para tratar tos, resfriados, gripe o alergias sin consultar al médico. Además, se debe tener precaución con los medicamentos para perder peso.

Este medicamento puede afectar los niveles de azúcar en sangre, por lo que los diabéticos deben informar a su médico antes de realizar cambios en su dieta o medicación.

Es importante informar al médico si se va a someter a una cirugía, procedimiento médico o pruebas mientras se está tomando este medicamento.

¿Cuáles son los efectos secundarios de este medicamento?

Se debe informar al médico si se experimenta alguna reacción alérgica, cambios en el estado de ánimo, problemas respiratorios, dolor en el pecho, entre otros síntomas graves.

Algunos efectos secundarios comunes incluyen cambios en el deseo sexual, problemas gastrointestinales, aumento de la sensibilidad al sol, dolores musculares y fatiga.

Es posible que no se mencionen todos los efectos secundarios, por lo que se debe consultar al médico ante cualquier síntoma inusual.

¿Cómo debo almacenar mi medicación?

Se debe mantener este medicamento fuera del alcance de los niños y almacenarlo a temperatura ambiente, entre 15º y 30º grados Celsius. Los medicamentos vencidos deben desecharse adecuadamente.